lunes, 6 de diciembre de 2010

Cuando me alcances.

Si me quieres o te quiero eso ahora importa poco, echo de menos un tipo de cariño que pocos son capaces de dar, ese cariño sin sentimientos, sin color, sin consecuencias, un cariño que no tiene nada que decir, nada que contar.
Cógeme de la mano y arrastrame hasta el lugar más oscuro de este lugar, mímame, da pasos disfrazados de amor, de ternura. Araña mi sensibilidad y destrózala, no me importa, no te quiero, simplemente me haces falta.
Realmente también yo te hago falta, si no no estarías aqui,si no nuestro contacto no sería constante, desenfrenado, suicida, valiente, indiferente, incluso doloroso, porque quizás esto sea lo más parecido al fin del mundo, quizás tus latidos y mis suspiros se escuchen por toda la ciudad como un aullido que resulta repetitivo, incansable, desesperado.
Dame toda la rabia que te sobra, cada una de tus respiraciones, cada parte de tu ser que más me odie pero date prisa, falta poco para que salga el sol, para que la rabia mágica se esfume, para que mi deseo desaparezca, porque mañana no te acordarás de nada y yo me negaré a recordarte, porque mañana habrás desaparecido y lo que pasó solo lo sabremos tú y yo, porque mañana cuando crucemos la puerta no nos volveremos a ver, porque solo podrás volver a mirar estos ojos desde arriba cuando me alcances.

L.I.M.-

No hay comentarios:

Publicar un comentario