lunes, 25 de abril de 2011

Extraño conocido

No buscaba príncipes, ni ranas, ni tampoco un amigo al que contarle sus historias día tras día, sólo buscaba ser feliz. Encontraba ese rayo de felicidad en conversaciones simples y sin sentido, como las que mantenía con aquel extraño conocido desde hacía algún tiempo.
En uno de sus interminables paseos, del cuello de ella resbaló aquel colgante de cristal que siempre llevaba puesto, y  acto seguido ambos empezaron a buscarlo con ansia.
Ante el fracaso de la misma, decidieron hacer un trato medio en broma medio en serio:
- Dime que nunca te vas a separar de mi.
- ¿Qué tiene eso que ver con el colgante?
- Nada, pero se me ha ocurrido algo. El día que lo encontremos, tú podrás marcharte de mi lado y no volver jamás, y yo olvidaré que has existido y todo lo que he llegado a sentir estando contigo.
- Está bien, en ese caso lo buscaré todo el tiempo!
Ambos rieron durante un largo rato.
Después, cuando él se marchó, ella se encaminó hacia la playa, al lugar que siempre iba cuando necesitaba pensar en si misma. Un pequeño balcón apartado del mundo y pegado al mar, donde las olas salpicaban sus mejillas cuando la marea enfurecía.
Una vez allí metió la mano en el bolsillo, sacando de él el colgante, y lo lanzó al agua con todas sus fuerzas. Acto seguido, se dijo a si misma: Así, tú buscarás algo, a mi ya no me hará falta, yo ya he encontrado la felicidad.

martes, 19 de abril de 2011

Que las verdades, con verdades se pagan.

Ya no me quedan vidas enteras, ni medias, ni partidas por ningún sitio. Ya no hay motivos para librar mis propias guerras, ni cartas en asuntos pendientes.
No existen logros que me hagan ver que la sinceridad existe, que las verdades, con verdades se pagan, que hay algo más allá de las ilusiones.
Lo repetí una y otra vez, yo no creo en la posesión de las personas, no creo en el valor de las cosas materiales, no creo en la vida como tal, ni en que las desgracias vengan siempre acompañadas. No creo en el equilibrio entre lo bueno y lo malo, ni en la buena suerte.
A lo único a lo que me aferraba era a que si pedía verdades, por dolorosas que pudieran ser, me las iban a dar. Ahora sé que en eso, para variar, también me equivocaba.

lunes, 18 de abril de 2011

En un banco de un parque cualquiera.

Quien sienta que se quede, quien no que siga andando, pero jamás se dé la vuelta para buscarme de nuevo, porque yo ya no estaré allí, me habré marchado digna, aunque triste y cabizbaja.
El tiempo me ha enseñado que hay cosas que no cambian, hechos que siempre suceden de la misma manera, ganas que siempre se quedan en eso, ganas.
Me duele empeñarme en confiar en quien no demuestra demasiado, me asquea pensar que cualquiera es más que yo y que no sirvo ni para agarrar de la mano a la persona adecuada.
Ojalá llegue el momento en el que tenga que retractarme de mis opiniones y tragarme cada una de mis palabras. Ojalá el día de mañana pueda sentarme en un banco de un parque cualquiera y con la mirada perdida, decir: "soy completamente feliz".

viernes, 8 de abril de 2011

¿Esto o lo otro?


★ Labios u ojos?: Ambos.
★ Besos o abrazos?: El conjunto crea la explosión.
★ Alto o bajo?: Alto.
★ Amor o Sexo: Amor sexualmente activo.
★ Romántico o espontáneo?: Espontáneamente romántico.
★ Bonita tripa o brazos?: Bonitas intenciones.
★ Sensible o no?: Sensible y adictivo.
★ Rollo o relacion?: Respeto.
★ Dulce o Duro?: Dulce, duro e irresistible.
★ Problemático o discreto?: Que trate los problemas con discreción.